Medicamentos opioides para el dolor

Conozca los riesgos y consejos para un uso seguro
Los opioides son medicamentos que ayudan a aliviar el dolor. Afectan el cerebro al bloquear o reducir las señales de dolor y al interactuar con el sistema de recompensa. Legalmente, están disponibles en forma de analgésicos recetados, como hidrocodona y oxicodona; e ilegalmente, como heroína. Los opioides recetados pueden ser muy adictivos y peligrosos si no se utilizan de forma adecuada.
Efectos secundarios
Puede tener efectos secundarios de los opioides recetados, incluso cuando los toma según las indicaciones del médico. Los analgésicos opioides pueden causar lo siguiente:
- estreñimiento
- náuseas, vómitos y sequedad bucal
- confusión
- depresión
- fatiga y mareos
- picazón y sudoración
El uso a largo plazo puede generar efectos secundarios como los siguientes:
- tolerancia
- dependencia
- aumento de la sensibilidad al dolor
- adicción
- sobredosis
Uso seguro
Si le recetan un analgésico opioide durante su estadía hospitalaria, asegúrese de conocer los posibles riesgos. Hable con el médico acerca del uso seguro y recuerde los siguientes consejos:
- Tome los analgésicos opioides exactamente según lo prescrito.
- Haga un plan con el médico que cubra sus preguntas y preocupaciones, cuándo debe hacer un seguimiento con él y otras formas de controlar el dolor.
- No beba alcohol mientras toma analgésicos opioides y pídale al médico una lista de los medicamentos que debe evitar.
- No comparta sus analgésicos opioides ni use los de otra persona.
- Almacene sus medicamentos recetados en un lugar seguro al que no puedan acceder otras personas.
Deseche de forma segura los comprimidos sobrantes; para averiguar cómo, visite fda.gov y busque “eliminación de medicamentos”.
Si usted o alguien que conoce tienen problemas de adicción, no espere para obtener ayuda. Llame al 1-800-662-HELP o visite
samhsa.gov/find-help.